Según el estudio mundial de Ipsos, Global Health Service Monitor 2023, la salud mental es el problema de salud más importante al que se enfrenta la población a nivel mundial, con una media del 44%. Un dato que crece 7 puntos desde el año pasado, y 18 desde la pandemia, lo que ha producido que por primera vez desde que se realiza este estudio, la salud mental desbanque al cáncer como la enfermedad que más preocupa a la ciudadanía mundial. Para esta encuesta, Ipsos entrevistó a un total de 23.274 adultos mayores de 18 años en India, de 18 a 74 años en Canadá, República de Irlanda, Malasia, Nueva Zelanda, Sudáfrica, Turquía y Estados Unidos, de 20 a 74 años en Tailandia, de 21 a 74 años en Indonesia y Singapur, y de 16 a 74 años en el resto de países.
El caso español es aún más relevante. Por tercer año consecutivo, la salud mental se posiciona como el problema de salud más importante al que se enfrenta la gente en España. A raíz de la pandemia del Covid, la preocupación por la salud mental ha ido creciendo, tanto que desde el 2020 ha aumentado 45 puntos porcentuales, pasando de un 16% a un 61% actualmente. Este dato sitúa a España como el país de los 31 analizados, donde más ha aumentado la preocupación por la salud mental en los tres últimos años, por detrás de Suecia (67%), donde se da la circunstancia de que la preocupación por esta enfermedad siempre ha sido alta, incluso antes de la pandemia. Ya en 2018 el 59% de la población sueca la señalaba como uno de los principales problemas de salud a los que se enfrentaba el país.
El citado estudio revela además que el estrés es el tercer problema de salud más grave al que se enfrenta la población mundial, señalado por un 30%, de media, a nivel global, y un 33% por la población española. En esta nueva investigación, se resalta el impacto que el estrés está teniendo en la vida cotidiana de las personas, donde la mitad de la población española (52%) afirma haber experimentado periodos de estrés durante el último año en los que no pudieron hacer frente a la situación.
Es más, un 40% se ha sentido deprimido hasta el punto de sentirse triste o desesperanzado y un 33% declara haberse ausentado del trabajo por estrés en los últimos doce meses.
De nuevo, son los menores de 35 años los que más preocupación muestran por el estrés, con un 36% y según se va incrementando la edad va bajando: 33% entre 25 y 49 años y 30% entre los mayores de 50 años. En este caso no hay diferencias significativas de género. A nivel europeo, Suiza (39%), Suecia (38%), Polonia (37%) y Francia (36%) son los países más preocupados y Reino Unido (15%) e Irlanda (18%) los que menos.
