¿Estamos preparados para pensar y actuar digitalmente? ¿Conocemos el significado de Transformación Digital más allá…
El Método de Marisa Salanova o cómo abrazar el cambio sin reticencias
- 160 Views
- Redacción Mi Empresa es Saludable
- 5 marzo 2024
- Actualidad Bienestar
La palabra resiliencia resuena en nuestros oídos. Lo hace desde que el 2020 (y años posteriores) nos demostrase que todo puede dar un giro radical en cuestión de horas. Y que la única forma de sobrevivir es adaptarse lo más rápido posible al cambio.
De hecho, al concepto resiliencia le han sobrevenido otros, como el de liderazgo transformador. Todos ellos encaminados a inculcar en la sociedad, en general, y en el mundo empresarial, en particular, la inevitable tendencia al cambio, a uno cada vez más rápido y drástico. Una organización saludable, también es una organización resiliente.
Pero ¿cómo cultivar el poder de la resiliencia?, ¿de la transformación? Una mujer tiene la clave: María Salanova.
Cultivar la resiliencia para ser organizaciones más saludables
Esta reconocida Doctora en Psicología y Catedrática de Psicología Social, especializada en Psicología Organizacional Positiva en la Universitat Jaume I (UJI), es directora del equipo de investigación WANT_Prevención Psicosocial y Organizaciones Saludables de la UJI. En otras palabras, tiene mucho que decir sobre organizaciones saludables en la presente era, como así demostró con su trabajo más reconocido “Organizaciones Saludables y Desarrollo de Recursos Humanos” (2008)
De hecho, es autora de libros como Resiliencia: ¿Cómo me levanto después de caer?, su última publicación; El engagement en el Trabajo, Desarrollo de recursos humanos a través del aprendizaje para el cambio o Tecnoestrés.
Según Salanova, la resiliencia se puede entrenar a través de recursos propios de la psicología positiva. Y hacerlo capacita a los individuos, a la sociedad y a las organizaciones de dos cualidades ventajosas:
- La capacidad de prepararnos para afrontar una adversidad en mejores condiciones.
- La capacidad de levantarnos para superarnos y reconstruir en clave positiva.
Estas dos perspectivas resultan imprescindibles para aquellas organizaciones que desean no ya liderar el cambio en esta década, sino simplemente no sucumbir a él, preservando la salud integral de quienes las conforman.
Una cuestión de salud y cultura empresarial
La evolución de tecnologías transgresoras como la IA, la digitalización empresarial, los retos climáticos más acuciantes o una mayor inestabilidad a nivel internacional obligan a las empresas a estar más preparadas que nunca para el cambio.
Y este estar listos para la transformación requiere de su implantación en la cultura empresarial. Es algo que los líderes de las organizaciones y los departamentos de RRHH y bienestar han de inculcar a sus plantillas. Porque, a menudo, el miedo a lo desconocido, a la incertidumbre, provoca una fuerte desmotivación, cuando no atenazarnos por el miedo.
El fortalecimiento de las personas, las relaciones sociales positivas y las prácticas organizacionales saludables contribuyen a la preparación de las empresas ante escenarios incluso apocalípticos. Pero, para ello, se necesitan altas dosis de previsión, de trabajo previo, que asiente una cultura organizacional proclive a la asunción del cambio para que este juegue a su favor.
Lo pudimos ver durante la pandemia. Como aquellas compañías que ya habían implantado el modelo de trabajo híbrido o procesos de digitalización pudieron adaptarse en mejores condiciones a la nueva situación, partiendo en notable ventaja respecto a sus competidoras.
Organizaciones resilientes y estrategia
Explicaba Marisa Salanova en un monográfico del International Journal of Social Psychology de 2020 a raíz de la pandemia sanitaria, que las organizaciones tendrían que promocionar la salud entre su personal, mediante recursos de resiliencia, para reaccionar a tiempo ante una crisis incipiente. Esto les permitiría no solo capearla, sino aprender de los errores del pasado y crecer como organización.
En otras palabras: la resiliencia necesita de una estrategia clara y definida de antemano. Y que además sea de carácter integral. Es decir, permeable a todas las áreas de la empresa, procurando la resiliencia financiera, operativa, de infraestructuras, de personal o de reputación.
La organización resiliente, aquella capaz de crecer ante la incertidumbre, será aquella en disposición de liderar el cambio de forma saludable.
Artículos relacionados
- Transformación digital: Un cambio de mindset
- Vencer al estrés para afrontar el cambio
Gestionar el estrés que provocan los cambios es una de las habilidades clave en el…
- ¿Qué es la gestión del cambio?
La naturaleza humana está hecha para explorar y cuestionar, pero es algo que muy pocos…