No todas las empresas están hechas para el teletrabajo, tampoco todos los profesionales. Sin embargo, lejos de retroceder, esta modalidad ha evolucionado a una fórmula que parece mucho más satisfactoria para las plantillas: el trabajo híbrido.
Varios estudios, como el lanzado por la británica CIPD sobre las oportunidades de trabajo flexibles o el Estudio de Tendencias en Recursos Humanos 2023 elaborado por Sodexo, ofrecen datos que no hacen sino apuntalar esta percepción generalizada: los y las profesionales apuestan por una jornada laboral mixta, en la que se alternan los días en la oficina con otros de trabajo en remoto.
De hecho, la modalidad híbrida, aquella que combina presencialidad con trabajo desde casa, es la preferida para el 53 % de las personas consultadas, seguida de la completamente presencial (31 %) y de la completamente en remoto (16%), según el informe de Sodexo.
Pero, ¿a qué se debe esta preferencia y por qué las empresas están facilitando su implantación a través de espacios de trabajo innovadores?
Las razones las encontramos en las demandas laborales de las nuevas generaciones de empleados y empleadas. Quieren más flexibilidad, mayores posibilidades de conciliación y ahorrar en costes innecesarios, por ejemplo, en transporte diario o combustible para ir a trabajar.
Pero también desean estrechar lazos con sus compañeros de equipo, desarrollarse no solo como profesionales, sino como personas, y hacerlo en ambientes agradables y motivadores.
En otras palabras: desean establecer conexiones, sinergias, que les ayuden a crecer en espacios colaborativos. A veces, el objetivo de acudir tres días por semana a la oficina es, simplemente, no convertirse en alguien invisible para el resto de la corporación.
De hecho, a la hora de enfrentarse a una oferta de trabajo, resulta más decisivo contar con varios días de teletrabajo que una remuneración mayor, para buena parte de los nuevos perfiles profesionales. Y ese es el quid de la cuestión para las empresas.
En sectores donde los perfiles cualificados escasean, atraer al talento humano con una oferta laboral híbrida puede marcar la diferencia. De hecho, las jornadas mixtas se han convertido en una medida infalible no solo a la hora de atraer profesionales, sino de fidelizarlos y hacer frente a problemas estructurales, como la rotación de personal.
Pero ¿cómo se prepara una empresa para la vuelta parcial de los y las trabajadoras a sus instalaciones? Sin duda, emplazándose en inmuebles que recojan las nuevas señas de identidad corporativa, aquellas que definen a las marcas del futuro: flexibilidad, resiliencia, transparencia, cooperación, diversidad, inclusión e igualdad en organizaciones transversales.
No es fácil reunir dichos criterios en espacios de trabajo. Sin embargo, la arquitectura y el diseño interior de estos últimos es esencial para crear la atmósfera necesaria, aquella capaz de reflejar el ADN de los nuevos valores empresariales.
Un buen ejemplo de cómo un espacio empresarial logra este cometido nos llega de la mano de la Torre Emperador Castallana. Una opción perfecta para el alquiler de oficinas que encajan con ese ideal que queremos para nuestra actividad diaria. Propiedad de Emperador Properties, cuyo propósito es la humanización de las grandes torres: una filosofía de integración entre las necesidades y aspiraciones de sus inquilinos, y la propuesta de servicios y atención personal que ofrecen a través de sus activos.
Situada en un entorno privilegiado en el distrito financiero de Madrid, en la zona de las Cinco Torres, Torre Emperador Castellana ofrece una amplia variedad de espacios capaces de responder a las necesidades del futuro, además de un abanico de servicios añadidos para que los y las profesionales puedan optimizar su tiempo yendo al gimnasio, disfrutando de una oferta gastronómica de calidad, acudiendo a comercios o disfrutando de servicios wellness dentro de un edificio que ya es un icono de la ciudad. Es decir, un espacio dedicado a incrementar el bienestar físico y emocional de las plantillas, con el objetivo de que las personas se sientan afortunadas de trabajar allí.
Esta Torre, obra de Pei Cobb Freed & Partners, uno de los estudios de arquitectura más prestigiosos y galardonados del mundo, ha sido aplaudida por su eficiencia energética y por el bienestar que procura a todos sus inquilinos. De hecho, cuenta con la doble calificación de “Excelente” y “Excepcional” en certificados internacionales de evaluación como BREEAM® ES y la certificación WELL
Por otro lado, las tendencias actuales requieren espacios de trabajo personalizados que además de ser cómodos potencien la creatividad y aseguren el bienestar en función de la dedicación, de los valores y de la filosofía de cada empresa. Los espacios de Torre Emperador Castellana están diseñados para inspirar y favorecer el trabajo en equipo y cuentan con un entorno que proporciona calidad de vida a los trabajadores.
Una de las claves es favorecer el networking, ya que hoy más que nunca se considera uno de los ejes fundamentales relacionados con la productividad y el crecimiento de las compañías. Desde los espacios comunes, los inquilinos de la Torre tienen la posibilidad de compartir momentos con otros profesionales.
Sin duda, un espacio estimulante que no necesita carta de presentación cuando, desde los departamentos de RRHH, lanzamos una oferta de trabajo, capaz de atraer a los talentos más exigentes por el simple hecho de ubicarse en un edificio concebido para satisfacer las más altas expectativas de los equipos.
